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Este programa de reforestación también tiene como propósito apoyar al campo mexicano.
Con la finalidad de combatir el Cambio Climático que afecta a todo el mundo, Sembrando Vida es una de las mayores propuestas de reforestación que hay en el mundo, y es una iniciativa mexicana. Así es, México es el país que implementa el programa de reforestación más grande del mundo, con una inversión anual de mil 300 millones de dólares.
Esto tiene como medida proteger al medio ambiente con cobertura en 21 estados de la República, en donde se han beneficiado a 449 mil 686 campesinos y campesinas, con la reforestación de más de un millón de hectáreas, impulsando la economía local en mil 14 municipios del país.
Se han producido mil 400 millones de árboles frutales y maderables, bajo un sistema agroecológico sin el uso de químicos. Asimismo, se han conformado más de 18 mil Comunidades de Aprendizaje Campesino (CAC), espacios donde trabajan en equipo e intercambian experiencias más de 4 mil técnicas y técnicos sociales y productivos.
Las personas beneficiarias del programa reciben un apoyo económico de 6 mil pesos mensuales, y se les proporcionan otros insumos como semillas, herramientas o plantas, en caso de que los necesiten.
De este modo, Sembrando Vida contribuye a la recuperación de suelos, a la reducción del dióxido de carbono y a la mejora del medio ambiente; además genera autoempleo y con ello, bienestar para las familias campesinas. Es un programa que promueve el Gobierno Federal, y que ayudó al rescate de más de 48 mil hectáreas de parcelas agroecológicas y agroforestales en Yucatán y Quintana Roo en los cinco años que va del programa.
En ambos estados, este proyecto ha servido para fortalecer el trabajo del campo, la labor que ejercen las y los hombres en sus parcelas, milpas y sacarlos del olvido en el que permanecían. En dicha entidad, se brinda el apoyo a más de 19 mil 208 personas, abarcando más de 48 mil hectáreas de tierras forestales nativas, frutales, agroindustriales, en combinación con la milpa maya.
Asimismo, se han creado viveros comunitarios y se han formado grupos para impulsar los modelos agroecológicos, con parcelas agroforestales, en unidades de producción de 2.5 hectáreas por beneficiario.
Este programa social ha brindado mucho apoyo al campo mexicano; de hecho, los seis mil 250 pesos que reciben los campesinos a través de las sucursales del Banco del Bienestar mediante las tarjetas vigentes que tengan los beneficiarios.
A diferencia de los demás programas sociales, Sembrando Vida no se entrega con base a un calendario donde se tome en cuenta la inicial del apellido paterno, es decir, una vez confirmada la fecha de pago, todos los beneficiarios podrán disponer de él.
Además, de los apoyos económicos, se busca reformar las leyes a modo de garantizar más apoyos tales como la entrega de fertilizante o bien, la garantía de precios justos en los insumos relacionados con el campo.