Fotos cortesía INE
Las elecciones del 2024 están cerca y la Sociedad Civil jugará un rol importante como observador de diversas candidaturas.
Cuando iniciaron las campañas electorales, el 30 de marzo de 2018, se dijo que serían las “más grandes de la historia de México” y que durante ese periodo de 90 días, la sociedad civil tenía que impulsar diversas iniciativas a favor de políticas públicas, con el fin de resolver las problemáticas que aquejaban al país.
De hecho, Yuri Gabriel Beltrán Miranda, Consejera Electoral del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) fue la que recalcó que la CDMX “tiene el desafío de lograr una elección muy observada y muy ciudadana. Lo que estamos haciendo es llamar a los ciudadanos que habitan en esta capital para que se acerquen y sean observadores electorales” En efecto, eso sucedió.
En las elecciones del 2018 hubo 548 observadores electorales en la Ciudad de México registrados, ante el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM). Pero, para las elecciones del 2024, que se llevaran a cabo el 2 de junio, ya suman 873 personas y organizaciones. Además, el registro concluye el 7 de mayo, por lo que podrían acreditarse más observadores.
Hasta el momento, el IECM ya ha aprobado 275, pero aún falta que el resto de los solicitantes realicen un curso y aprueben una evaluación en línea, mediante la cual se determina si tienen o no los conocimientos para ser registrados como observadores electorales.
En el curso en línea se les explica qué es lo que pueden hacer: “Básicamente, pueden observar, sin intervenir en ninguna fase del proceso, y pueden estar en casillas, en las sedes distritales, pueden presenciar el conteo de votos, la elaboración de las actas, pero sin intervenir, pueden estar en allí”.
La consejera actual, Erika Estrada, agregó que los observadores “pueden presenciar todo el proceso en una casilla electoral; ingresar con su gafete plenamente identificado o identificada y conocer aspectos importantes, como la instalación de la casilla, la apertura de la misma, el desarrollo de la votación”.
Los observadores también pueden ver cómo se hace el cómputo de los votos, cómo se asientan los resultados en las actas, si se levantan escritos de protesta o incidentes el día de la jornada electoral. Asimismo, la consejera Carolina del Ángel abundó que al final del proceso de observación de los diferentes momentos de la jornada electoral, los observadores “están en posibilidad de presentar un informe ante la autoridad electoral, en el que manifiesten todo lo que vieron”.
Dichos informes “sirven para evaluar el proceso electoral y sirve en las casillas electorales para verificar que la votación se llevó a cabo conforme al procedimiento legal”. La presencia y observación de la sociedad civil, permite inhibir los delitos que puedan cometerse durante la jornada electoral y ayudar a dar más certeza a la elección; esto con el fin de que sea la misma ciudadanía la que pueda constatar que no se realizan actos ilegales.
Hay que recordar, que en las elecciones de hace seis años, el IECM recibió informes de observadores que se compilaron en el documento Perspectiva Ciudadana, Informes de la Red de Observación 2017-2018, donde se describen casos de acarreo de votantes, propaganda ilegal y la propuesta de mejoras en la logística de las elecciones y distribución de tareas.
Solo por mencionar un ejemplo, la organización Apoyo e Integración Ciudadana, A.C. señaló incidencias como que “en la tienda ubicada frente a la casilla (361 básica) había propaganda del PVEM. Hubo presión del PRD para los votantes afuera de la casilla, y un hombre y dos mujeres del PRD con una lista de simpatizantes del partido visitaron sus domicilios para llevarlos a votar”.