Es posible una declaratoria de Patrimonio Cultural para pueblos y barrios originarios de CDMX

 

En 2023, la Secretaría de Pueblos, Barrios Originarios y Comunidades Indígenas Residentes (SEPI) informó que en la Ciudad de México se tienen localizados a 197 pueblos y barrios originarios de la capital; aunque el del gobierno local solo reconoció a 50, una cifra que apenas está por arriba del 26 por ciento del total y, pone en peligro su derecho a la auto adscripción.

Esto fue dado a conocer en su momento, por el presidente de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México, el legislador priísta Fausto Manuel Zamorano Esparza, quien se pronunció a favor de que las autoridades de la metrópoli declaren como patrimonio cultural inmaterial a los pueblos, barrios originarios y comunidades indígenas residentes en la ciudad.

Esta propuesta se presentó a las autoridades competencias, para que analizaran la viabilidad de hacer la declaratoria como patrimonio cultural inmaterial a los pueblos, barrios originarios y comunidades indígenas residentes en la capital; con el objetivo de reconocer a esos grupos, así como su importancia  cultural, expresiones y manifestaciones.

Asimismo, la propuesta tiene como propósito asegurar el ejercicio de los derechos fundamentales como el acceso al agua, la preservan su propia cultura, idioma, tradiciones y cosmovisión. No obstante, pueden enfrentar desafíos relacionados con la discriminación y la preservación de su identidad cultural en el entorno urbano.

Con esta bandera, la hoy candidata de la coalición “Sigamos Haciendo Historia” a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, anunció la creación de un fondo para apoyar las tradiciones y la cultura de los pueblos y barrios originarios de la capital del país; como parte de su campaña.

“Los carnavales, las comparsas, sus atuendos, sus colores y la música de los pueblos y barrios originarios son orgullo y patrimonio cultural intangible de la ciudad; queremos que la ciudad completa conozca, reconozca y valore estas tradiciones y costumbres, así que vamos a impulsar el gran carnaval de la Ciudad de México”, afirmó.

Asimismo, se comprometió a poner en marcha un intenso programa de rescate de las tradiciones y cultura comunitaria, y crear un fondo de apoyo para su promoción en todos los espacios públicos; además de reconocer la “resistencia de las tradiciones y la cultura popular de los pueblos originarios”, a los que calificó como orgullo de la capital.

Finalmente, hay qué señalar que la mayor parte de las comunidades que viven en la CDMX, tienen su origen en la época prehispánica, que fueron fundados por grupos de filiación otomangue, como los otomíes, y matlatzincas, y nahua. En la actualidad, la mayoría de los pueblos originarios poseen topónimos de origen náhuatl, aunque en muchos de ellos se hablaba otomí, mazahua y matlatzinca en el momento de la Conquista. Estos pueblos mantienen tradiciones y costumbre, que a pesar de haber sido regularizadas en la conquista, sobreviven en un rico sincretismo de tradiciones.