Consejos prácticos, rápidos y sencillos para reducir el calor en tu casa

Fotos cortesía de Turismo CDMX

Con estos consejos podrás mantener tu casa más fresca en épocas de calor.

 

El calor excesivo provoca muchos tipos de reacciones corporales, siendo las más frecuentes la deshidratación, y la fatiga. Es por eso que es recomendable beber mucho líquido, consumir alimentos ricos en agua, como frutas y vegetales, y en caso de hacer ejercicio, es mejor comenzar a hidratarse antes de la actividad, ya que te ayudará a reponer líquidos más rápido, además de que es necesario beber agua u otros líquidos después de que termines.

Ahora que ya sabes cómo mantenerte hidratado, y sin más dilación, te vamos a dar algunos consejos para que puedas estar más fresco en tu casa, a pesar de la ola de calor.

Colocar plantas 

Muchas casas en la CDMX tienen espacios para colocar plantas, pero si no es tu caso, puedes colocar algunas plantas en las ventanas, en donde pueden absorber los rayos de sol para brindar un espacio más fresco con el aire que brindarán a la estancia. Se dice que el aloe vera, la Ficus Benjamina, Palmera Areca y hasta la Lengua de Suegra y el Helecho son de las mejores plantas para interiores. Pero en realidad, tener una planta en casa, cualquiera, siempre es buena idea. 

Cerrar ventanas en el día y abrirlas por la noche 

La temperatura del día siempre será mayor que en la noche, ya que los rayos del sol inciden en la Tierra; si quieres evitar que ese calor afecte tu casa, se aconseja cerrar las persianas y ventanas en las que golpee el sol, para evitar que entre el bochorno de la calle y generes más espacios con sombra.

Cuando el sol se va, abre las ventanas y persianas, para que haya corriente y renovar el aire de la casa. Esto permitirá refrescar el ambiente y bajar la temperatura aprovechando el fresco de la noche.

Humedecer el ambiente

Al menos en las casas de la CDMX, es posible que la humedad actue de regulador térmico. Es posible humedecer un poco las cortinas, para dejar que el aire de la noche entre y logre disminuir la temperatura. Con ello se reducirá la sensación de sofoco o el golpe de calor que se pueda producir por el intenso calor del exterior. También puedes utilizar humidificadores u otros elementos que ayuden a generar esa humedad.

Evita el uso de electrodomésticos durante el día 

Todos los electrodomésticos, encendidos o solo enchufados, emiten calor constante. Para reducir la temperatura de tu casa, desenchufa estos aparatos si no los usas, y evita el uso innecesario de electrodomésticos, y así conseguirás reducir algunos grados en el interior de tu casa, además del consumo de tu factura eléctrica. 

Usa tejidos ligeros

Reducir la sensación de calor corporal, con el uso de prendas y tejidos más ligeros como prendas vaporosas, ropa de algodón o lino, entre otros materiales, también es viable, sobre todo para dormir mejor. 

Por supuesto, usar un ventilador te permitirá refrescar el ambiente. Recuerda orientar las aspas de manera correcta para que disipen el aire caliente con mayor rapidez ya que el calor se acumula en la parte alta de la vivienda.

Usa luces leds

Las bombillas incandescentes desprenden calor cuando están encendidas. Es recomendable sustituir estos elementos por luces leds que reducirán el consumo de electricidad y evitarán la emisión de energía calorífica que producen las tradicionales bombillas.

Además, puedes instalar elementos de aislamiento para tus ventanas y paredes, con estos puedes reducir la entrada del calor de la calle, incluso de frío en invierno y podrás generar un ambiente más agradable y constante durante todo el año y reducirá el gasto eléctrico de climatización ya sea por aire acondicionado o calefacción.