Jóvenes mexicanas crean Zitlala un videojuego en el blockchain que promueve la cultura náhuatl

Foto destacada: Zitlala

Zitlala es uno de los videojuegos que se suma a la lista de conservación del patrimonio cultural.

 

Con el fin de difundir y promover la conservación del patrimonio cultural a través del juego, se llevó a cabo la segunda jornada de “Juegos serios sobre la conservación y restauración de bienes culturales”, en el Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec, donde se presentarán ocho videojuegos y dos juegos de mesa desarrollados durante el proyecto “Game Jam para la conservación. Jugando aprendemos a conservar el patrimonio cultural”, el cual se realiza anualmente desde 2019.

Este año, la convocatoria se centró en el tema “Conservación del patrimonio gráfico-rupestre”, por lo que las y los asistentes podrán interactuar con estos materiales educativos y los creados en ediciones anteriores “La gráfica rupestre es un tipo de patrimonio que no muchas personas conocen, por lo que nos interesa fortalecer su divulgación, así como resaltar la importancia de las labores de conservación que realizan las y los especialistas en la materia”, apuntó la antropóloga adscrita a la Subdirección de Vinculación y Enlace de la CNCPC, Gabriela Durán Valis.

Los juegos estarán disponibles de manera gratuita en la página de la CNCPC, donde las personas interesadas podrán acceder a todos los materiales didácticos generados por el proyecto. En esta edición se completaron tres videojuegos y un juego de mesa, en el que participaron 38 personas, tres de ellas provenientes de Argentina, Bolivia y Chile.

Zitlala

Además del Jam de videojuegos, grupo de jóvenes mexicanas desarrollaron un videojuego innovador, con un enfoque educativo y cultural, incorporando el uso del idioma náhuatl para inspirar a los jugadores a aprender y apreciar distintos idiomas y culturas. 

Zitlala fue creado por un equipo compuesto por mujeres egresadas de Hackwomen, un programa especializado para la formación de mujeres desarrolladoras y su proyecto surgió como parte de la incubadora de proyectos blockchain Zona Tres Labs, incubadora oficial de ICP Hub México, en el que decidieron unir su pasión por los videojuegos y su deseo de rescatar y promover la cultura náhuatl.

El videojuego presenta a personajes como un alien, un robot y un humano, quienes deben salvar su mundo de dos amenazas inminentes: invasores y un agujero negro llamado Zitlala. Los jugadores deben activar portales interplanetarios desactivados durante una guerra pasada para poder salvar su universo. El objetivo fue crear una historia rica que mantuviera a los jugadores enfocados y motivados para completar el juego.

Una de las características distintivas del videojuego es la inclusión de términos en náhuatl, integrados cuidadosamente para que no se pierda su esencia y generen mayor interés en la lengua. El equipo tiene grandes planes para el futuro, incluyendo la expansión del juego a consolas y dispositivos móviles, y la implementación de una tienda virtual donde los jugadores puedan comprar y vender accesorios personalizados para sus personajes. 

Las jóvenes mexicanas han superado numerosos desafíos, desde aprender nuevas tecnologías en corto tiempo hasta organizar y consolidar sus ideas para crear un proyecto cohesivo y atractivo. Ahora, están planeando aplicar para un grant que les permita continuar desarrollando y mejorando su videojuego.