Espíritus, maldiciones y leyendas urbanas tomarán la pantalla grande de la Cineteca Nacional del 15 al 27 de julio. Bajo el nombre “Maestros del cine de terror japonés”, este ciclo reúne 12 películas clave del género, proyectadas como debe ser: en su formato original de 35 milímetros.
Organizado junto con la Fundación Japón en México, este recorrido fílmico va más allá del susto fácil. Aquí no hay screamers ni efectos exagerados. Lo que hay es atmósfera. Tensión. Y un tipo de miedo que, como lo explican los propios organizadores, “se siente más cercano, más íntimo y más perturbador que el del cine occidental”.
Entre los títulos programados están Cure (1997), Pulse (2001), El fantasma de Yotsuya (1959), Infierno (1960), Onibaba (1964), La Casa Negra (1999) y El Complejo (2013). También aparecen joyas como La Mujer Perdida (1953) o Kwaidan (1964), que hoy son consideradas piezas de culto.
Según Nelson Carro, director de Difusión y Programación de la Cineteca, la curaduría responde a dos criterios clave: relevancia cultural y experiencia estética. “La mayoría de las películas están en 35 mm, lo que ofrece una experiencia única. Muchas fueron creadas en los cincuenta, sesenta y setenta, y el formato fílmico nos permite revivir esa atmósfera que los directores querían transmitir”, explica.
Y si alguien todavía duda del poder del terror japonés, Carro lo deja claro: “Tiene una tradición que viene desde el cine mudo, con una presencia fantasmal mucho más sutil, más psicológica. En lugar de ir por el susto inmediato, va directo al inconsciente”.
Además de las proyecciones, el ciclo incluirá una charla con Salvador Velasco, especialista en cine de terror, el 21 de julio a las 18:00 h, ideal para quienes quieran entender más a fondo el contexto cultural detrás de estas películas.
La Cineteca ya tiene experiencia en este tipo de muestras: el año pasado, la retrospectiva de Kiyoshi Kurosawa agotó funciones. Esta vez, con una selección más diversa y una experiencia visual más pura, las expectativas son altas.
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Porque si de cine de terror hablamos, los japoneses son expertos. Lo demostraron a lo largo del siglo XX y lo reafirmaron a principios del XXI con una ola que redefinió el género a nivel global. Este ciclo es una oportunidad para descubrir —o redescubrir— por qué su visión del miedo sigue siendo tan relevante.
Las entradas están disponibles en taquilla y en el sitio oficial cinetecanacional.net. El boleto general cuesta $70 pesos, con descuento de $50 los martes y miércoles. Las funciones van del 15 al 27 de julio, en la Cineteca Nacional, ubicada en Av. México-Coyoacán 389, colonia Xoco, CDMX.
No necesitas volar a Tokio para sentir el verdadero terror japonés. Solo basta con entrar a una sala oscura y dejarte llevar.
Películas proyectadas:
Cure – Kyua, Japón, 1997, 111 min
El Fantasma de Yotsuya – Yotsuya Kaidan, Japón, 1959, 84 min
Infierno – Jigoku, Japón, 1960, 101 min
El Más Allá – Kwaidan, Japón, 1964, 132 min
Onibaba, El Mito del Sexo – Onibaba, Japón, 1964, 102 min
Pulse – Kairo, Japón, 2001, 118 min
La Casa Negra – Kuroi ie, Japón, 1999, 118 min
El Complejo – Kuroyuri danchi, Japón, 2013, 106 min
La Cara de Otro – Tanín no Kao, Japón, 1966, 124 min
El Clan Inugami – Inugami-ke no Ichizoku, Japón, 1976, 146 min
La Mujer Perdida – Ugetsu, Japón, 1953, 96 min
Historia de Fantasmas de Yotsuya – Tokaido Yotsuya Kaidan, Japón, 1959, 76 min
El ciclo Maestros del cine de terror japonés no solo es una invitación a asustarse, sino a mirar de frente una tradición cinematográfica que entiende el miedo como un arte. Es una ventana a los fantasmas que habitan en la memoria colectiva de Japón y que, desde la pantalla, logran perturbar mucho después de que terminan los créditos. Una experiencia imperdible para quienes buscan algo más que el susto: una historia que se queda contigo.

