Las más recientes cifras del Inegi, que retoman la metodología del extinto Coneval, muestran una reducción en algunos indicadores de pobreza, particularmente en la pobreza multidimensional, aunque la pobreza extrema sigue afectando a millones.
El análisis parte de la visión del expresidente Andrés Manuel López Obrador y su lema “primero los pobres”, una estrategia que, de acuerdo con Javier Solórzano, ha sido clave más allá de lo ideológico o electoral, pues coloca a los sectores más vulnerables en el centro de las políticas públicas.
“El hecho de que lo planteara como un eje es importante… tenemos que pensar en los más desprotegidos”, señala.
El reporte destaca el impacto de programas como Jóvenes Construyendo el Futuro o las pensiones para adultos mayores, pero también resalta el papel del trabajo –formal e informal– como motor principal de ingresos para las familias.
El especialista advierte que los avances deben consolidarse como tendencia sostenida, pues la mejora podría revertirse ante un crecimiento económico bajo y presiones presupuestales que amenazan la continuidad de los programas sociales.
La recuperación de la metodología del Coneval permite un análisis más profundo gracias a múltiples variables que facilitan un diagnóstico preciso de la situación.
Este diagnóstico es esencial para diseñar estrategias efectivas, tal como subraya la analogía: “No puedo construir un edificio sin estudiar el terreno; lo mismo pasa con la política social”.
El panorama económico, con alta deuda y recursos limitados, plantea incertidumbre sobre la sostenibilidad de las políticas actuales. Sin embargo, el día en que se presentaron las cifras fue calificado como “un buen día” para pensar en un México que podría mejorar si mantiene la tendencia positiva.
Cifras de INEGI
El Instituto presentó cifras que revelaron que hubo una disminución en los índices de pobreza en 2024 al pasar de 38.5 millones de personas, a las 51.9 millones que enfrentaban esa condición en 2018. Mientras que en 2022 fueron 46.8 millones.
Lo anterior indica que 8.31 millones de personas dejaron atrás la condición de pobreza entre 2022 y 2024. Cabe mencionar que la medición consideró el nivel de ingresos, acceso a derechos como vivienda, salud, educación y alimentación. Es decir, lo que el Inegi denomina pobreza multidimensional.
¿Cuáles son las Líneas de Pobreza Extrema por Ingresos?
En el caso de la pobreza extrema, los datos reflejan que de 8.7 millones de personas en 2018, la cifra bajó a 7 millones en 2024. De manera proporcional, esto significa que el porcentaje pasó de 7 % a 5.3 % en ese mismo periodo.
Hasta julio de 2025, el umbral de pobreza extrema por ingresos —equivalente al costo mensual de la canasta alimentaria básica— es de 1,856.91 pesos en zonas rurales y 2,453.34 pesos en zonas urbanas.
Estos montos representan el ingreso mínimo requerido para cubrir exclusivamente las necesidades alimentarias esenciales. Si bien, se registró una disminución en los niveles de pobreza y pobreza extrema, los ingresos demuestran que no son ni por mínimo suficientes para sostener a una familia.
¿Qué estados presentan la mayor y la menor pobreza extrema en México?
De acuerdo con el Inegi, Chiapas encabeza la lista de entidades con mayores niveles de pobreza extrema, con el 27.1 % de su población en esta condición. Le siguen Guerrero (21.3 %), Oaxaca (16.3 %), Veracruz (8.8 %) y Puebla (7.3 %).
En contraste, los estados con menor incidencia son Baja California (0.4 %), Nuevo León (0.5 %), Aguascalientes (0.6 %), Coahuila (0.8 %) y Colima (1.0 %).

