En los áridos paisajes de Sonora, donde la historia minera ha moldeado la identidad de comunidades enteras, un nuevo hallazgo ha captado la atención de geólogos, inversionistas y autoridades por igual: la localización de extensos yacimientos de cobre, un mineral que ha pasado de ser considerado un recurso industrial más, a convertirse en uno de los pilares esenciales de la economía verde global.
No es exageración hablar de una nueva fiebre del cobre. La comparación con el oro del siglo XIX no se basa solo en su valor monetario, sino en el rol crucial que este metal desempeña en la infraestructura moderna. Desde las redes eléctricas hasta los vehículos eléctricos, pasando por los sistemas de energía renovable y la electrónica de consumo, el cobre es el nervio conductor del siglo XXI. Y ahora, México se encuentra en el centro de esa demanda creciente.
El descubrimiento, aunque aún en fase exploratoria, ha sido confirmado por fuentes estatales y locales, y forma parte de una tendencia que se viene gestando en Sonora desde hace más de una década. El estado, conocido por su tradición minera en oro, plata y molibdeno, ha demostrado también contar con una geología rica en cobre, particularmente en la región de Cananea, cuna de una de las minas de cobre más antiguas y emblemáticas del país.

Los depósitos de cobre en México se concentran principalmente en Sonora, con minas de clase mundial como Cananea y La Caridad. El informe oficial afirma que “el 76.47% de la producción nacional proviene de este estado”. A ellos se suman proyectos en Zacatecas, San Luis Potosí y Chihuahua, indica un informe de De la Dirección General de Desarrollo Minero, DGDM. El cobre se muestra entonces como el nuevo oro rojo del siglos XIX.
El documento precisa que “los sistemas de pórfido de cobre aparecen en un cinturón orientado NE-SW a lo largo del oeste del país”, con alrededor de 60 depósitos identificados. Este potencial convierte al cobre en uno de los recursos más estratégicos de México en el siglo XXI.
Minas y estados con producción de cobre
El reporte destaca que las minas Buenavista del Cobre y La Caridad en Sonora son consideradas depósitos de clase mundial, junto con yacimientos en Sinaloa, Zacatecas y Baja California Sur. Empresas como Grupo México y Capstone Mining encabezan la producción.
Según el documento, “el 70% de los depósitos de cobre se encuentran en el noroeste de México”, lo que coloca a la región como una de las más competitivas a nivel internacional para la producción de este mineral.
El valor del cobre como metal estratégico
El cobre es hoy el “nuevo oro” debido a su papel central en la transición energética y la industria tecnológica. El informe señala que “los depósitos de cobre son los más importantes y mejor conservados de México”.
Por otro lado, la demanda global de cobre lo posiciona como un recurso invaluable: desde la fabricación de autos eléctricos hasta la infraestructura de telecomunicaciones, el cobre se perfila como un metal que define la economía del futuro.

