En las montañas de Xochistlahuaca, en la costa de Guerrero, México, arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) encontraron algo más que piedras antiguas: hallaron un espacio donde los dioses jugaban.
Los restos de una ciudad de más de 1.200 años de antigüedad, llamada Paso Temprano, se conserva una cancha de juego de pelota mesoamericana en un estado excepcional, un recinto sagrado que articulaba toda la vida urbana, política y espiritual de la región.
El estado de Guerrero aún guarda muchos tesoros arqueológicos y misterios. La incansable labor del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha logrado descubrir interesantes testimonios del pasado en la entidad. Recientemente, un equipo de arqueólogos de esta institución descubrió los restos de una antigua ciudad. El nombre que la han dado es Paso Temprano, y ha revelado la existencia de una cultura prehispánica que permanecía desconocida para los eruditos.
El descubrimiento de Paso Temprano
El nuevo sitio arqueológico fue descubierto en la serranía de la comunidad de El Carmen, en el municipio de Xochistlahuaca, en la Costa Chica de Guerrero. Los arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) lo han nombrado Paso Temprano o Corral de Piedra. La antigua ciudad ha sido datada dentro del periodo Epiclásico (650 d.C.-950 d.C.). Es decir, cuenta con una antigüedad de 1,200 años.
Su alto grado de conservación ha permitido identificar en el sitio arqueológico diversos elementos típicos de las culturas de Mesoamérica en el mencionado periodo: conjuntos habitacionales y palaciegos, un juego de pelota, una muralla defensiva; estelas, altares y muros. Lo sorprendente es que el lugar es el remanente de un asentamiento cuya dimensión original fue de más de 1.2 kilómetros de longitud. Por la distribución de los edificios en la elevación natural, se ha podido distinguir que allí existió una sociedad estratificada.
Una nueva cultura prehispánica del estado de Guerrero
Gracias a todo lo anterior, los arqueólogos han logrado identificar que la gente que habitó el Paso Temprano es una nueva cultura prehispánica de Guerrero. Además, la distribución arquitectónica y el sistema constructivo de aquella ciudad se vinculan con otros emplazamientos. Y es que una serie de sitios localizados en los cerros de la Costa Chica, tienen rasgos similares. El sistema constructivo de todos ellos se ha nombrado “paramento mixteco”. Este estilo consiste en bloques verticales intercalados con pequeñas lajas, tal como los de la zona arqueológica de Tehuacalco.
Si bien, la región es habitada actualmente por pueblos nahuas, al momento de la llegada europea a Mesoamérica comunidades amuzgas y mixtecas eran las que vivían allí. Por ello, Paso Temprano y el descubrimiento de su cultura reescriben, entonces, lo que se conocía de la región durante época prehispánica.

