Descubren observatorio astronómico con forma de escorpión en Tehuacán

Un observatorio astronómico de más de 1,400 años de antigüedad, construido sobre un montículo efigie con forma de escorpión, fue descubierto en el sur del Valle de Tehuacán. El hallazgo, revelado por la Universidad de Cambridge, fue catalogado como una construcción sin precedentes en Mesoamérica. Dicha estructura permitía a los antiguos pobladores de la región determinar los solsticios de verano e invierno, estaciones cruciales que permitían a las civilizaciones antiguas optimizar sus cultivos en una de las regiones más áridas de México.

La estructura, que mide exactamente 62.5 metros de longitud, representa el primer montículo efigie con forma de escorpión documentado de manera oficial en nuestro país. Además, según especialistas, constituye una evidencia jamás vista en la región sobre cómo las sociedades prehispánicas integraron conocimientos astronómicos avanzados con tecnología agrícola, con la finalidad de programar cultivos y prepararse para las condiciones climáticas desafiantes.

La investigación fue encabezada por James Neely, catedrático del Departamento de Antropología de la Universidad de Texas (UT) en Austin. También participaron los investigadores Blas Castellón Huerta, de la Dirección de Estudios Arqueológicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH); Mark Wills, de la Universidad del Sur de Australia; así como Samuel Wilson y Chester Walker, ambos de la UT.

Según el artículo publicado por la Universidad de Cambridge, en el Reino Unido, el montículo fue colocado de forma estratégica justo en el centro del mayor sistema de riego prehistórico conservado en Mesoamérica, el cual abarca aproximadamente 100 kilómetros cuadrados de canales de irrigación que han funcionado de manera continua durante más de 4 mil años.

Los investigadores expusieron que la orientación de la estructura con forma de escorpión permitía a los antiguos pobladores del Valle de Tehuacán observar exactamente cuándo el sol salía sobre puntos específicos del montículo durante los solsticios.

A partir de ello, las civilizaciones crearon un calendario que proporcionaba información confiable que les permitía planificar sus siembras antes del inicio de las lluvias. Asimismo, les permitía organizar sus cosechas según las estaciones del año.

De acuerdo con los expertos, este sistema de observación astronómica era fundamental para la supervivencia en la región, la cual se ha caracterizado históricamente por tener un clima árido, y donde cualquier actividad agrícola sin riego o sin la planeación correcta resulta imposible.

Hallan en Tehuacán un observatorio astronómico único en México con forma de escorpión
La estructura mide 62.5 metros de longitud, 13.2 metros de ancho en el cuerpo principal, 22.1 metros de ancho en las pinzas frontales y 80 centímetros de altura. / Foto: Cortesía Universidad de Cambridge

Investigadores utilizaron drones multirotor 3D y de ala fija Skywalker para ubicar la zona

La identificación del montículo efigie se dio luego de varias visitas realizadas por el equipo de arqueólogos. Inicialmente, el objetivo era analizar los canales de riego que funcionaron en la época prehispánica en la región, debido a que muchos de ellos ya no existen a causa del crecimiento acelerado de Tehuacán, lo cual, según apuntaron, ha dañado significativamente el patrimonio arqueológico de la zona.

Durante las expediciones, los investigadores utilizaron tecnología especializada, como drones multirotor 3D Robotic X8 y drones de ala fija Skywalker. Estas aeronaves no tripuladas están equipadas con cámaras de alta resolución capaces de crear modelos tridimensionales del sitio.

Así, se determinó que la estructura mide 62.5 metros de longitud, 13.2 metros de ancho en el cuerpo principal, 22.1 metros de ancho en las pinzas frontales y 80 centímetros de altura.

El montículo fue construido con fragmentos de travertino, una roca caliza que abunda en la Reserva de la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán. Dichos elementos pétreos fueron cuidadosamente colocados sobre un núcleo de tierra compactada. Esta técnica de construcción se ha documentado en otros sitios arqueológicos del valle.

Por otra parte, los investigadores señalaron que la datación del lugar se estableció a partir de análisis cerámicos exhaustivos, los cuales permitieron determinar que el establecimiento de la estructura ocurrió en los periodos Clásico Tardío y Posclásico, es decir, aproximadamente entre los años 600 y 1100 después de Cristo (d.C.). No obstante, la evidencia demostró que el montículo fue utilizado como observatorio astronómico por varios años más.

Relevancia social y económica del sitio

De forma concreta, los fragmentos de cerámica encontrados en el sitio incluyeron varios tipos de este material, como El Riego Gris, El Riego Negro, Coxcatlán Escobillado y Coxcatlán Rojo sobre Naranja, así como cerámicas policromadas de alta calidad.

Según se indicó, este hallazgo no solo permitió conocer la antigüedad del montículo, sino que sirvió para obtener información sobre la relevancia social y económica del mismo. Por ejemplo, los materiales encontrados en el sitio correspondieron a cerámicas de Cholula, la Mixteca oaxaqueña y el Golfo de México.

Por lo tanto, se indicó que esta diversidad cerámica demostró que el sitio era parte fundamental de las redes comerciales y sociales del valle con los principales centros de poder de Mesoamérica.

Hallan en Tehuacán un observatorio astronómico único en México con forma de escorpión
El montículo fue construido con fragmentos de travertino, una roca caliza que abunda en la Reserva de la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán. / Foto: Iván Venegas / El Sol de Puebla

Investigadores demandaron cuidado de la zona, ya que hay campos de cultivo, granjas avícolas industriales y carreteras cercanas. / Foto: Iván Venegas / El Sol de Puebla

Origen de la estructura

Otro de los hallazgos más relevantes establecidos en el artículo publicado por la Universidad de Cambridge fue la presencia de un molcajete de cerámica cubierto por un cuenco. Este elemento se encontró en la zona que corresponde a la cabeza del escorpión.

Según se indicó, dichos elementos correspondían a ofrendas, las cuales demostraron que el sitio conservó relevancia espiritual para los antiguos pobladores del Valle de Tehuacán.

Aunado a esto, se expuso que el simbolismo del escorpión en el contexto religioso de Mesoamérica añadió profundidad al hallazgo.

Según establecieron los arqueólogos, en la mitología azteca, el escorpión Tlāhuizcalpantēcuhtli representaba a Venus, considerada la Estrella de la Mañana; y mantenía relaciones simbólicas con Tláloc, la principal deidad de la lluvia y el agua; y con Quetzalcóatl, la Serpiente Emplumada, asociado con el viento, la fertilidad y el conocimiento.

Esta trinidad entre escorpión, Venus, Tláloc, Quetzalcóatl y agricultura reforzó la interpretación del montículo como elemento integrador de conocimiento astronómico, ritual religioso y tecnología agrícola.

Hallan en Tehuacán un observatorio astronómico único en México con forma de escorpión
Investigadores demandaron cuidado de la zona, ya que hay campos de cultivo, granjas avícolas industriales y carreteras cercanas. / Foto: Iván Venegas / El Sol de Puebla