Las palabras más estremecedoras del poeta Jaime Sabines.
Hijo de inmigrante libanés, Jaime Sabines nació el 25 de marzo de 1926 en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. El mismo escritor confiesa, que le debe a su padre el gusto por la literatura. Y fue por él que decidió dedicarse a escribir poesía. Aunque se percató de esto mientras cursaba la carrera para convertirse en médico.
Viajó a la Ciudad de México para cursar la licenciatura de Lengua y Literatura Española en la UNAM. Pero regresó a Chiapas durante un tiempo para trabajar en la tienda de telas de su hermano. Fue ahí donde escribió su emblemático poemario Tarumba.
Jaime Sabines era un hombre sencillo; casado y con cuatro hijos. Volvió a la capital, lugar donde sus obras empezaron a cobrar mayor reconocimiento. Diversos premios y reconocidos críticos dan fe de la calidad lírica presente en la poesía de Jaime Sabines, el poeta más querido de México. Aquí algunas de sus frases más entrañables:
“Cada vez que me siento crecer en compresión y en humildad, me siento crecer en la poesía.”
“¿Han visto ustedes un gesto de ternura en el rostro de un loco dormido?”
“Morir es retirarse, hacerse a un lado, ocultarse un momento, estarse quieto, pasar el aire de una orilla a nada y estar en todas partes en secreto.”
“Un pedazo de luna en el bolsillo es mejor amuleto que la pata de conejo.”
“Me tienes en tus manos y me lees lo mismo que un libro. Sabes lo que yo ignoro y me dices las cosas que no me digo.”
“El poema es el momento en que se capta con la sangre el pensamiento de la vida.”
“El amor es el silencio más fino, el más tembloroso, el más insoportable.”
“Repito tu nombre, vuelvo a decirlo, lo digo incansablemente, y estoy seguro que habrá amanecer.”
“Voy a seguir tus pasos hacia arriba, de tus pies a tu muslo y tu costado.”
“Los escritores no te dejan copiar su estilo, si acaso su libertad.”
“Te desnudas igual que si estuvieras sola y de pronto descubres que estás conmigo. ¡Cómo te quiero entonces entre las sábanas y el frío!”
“Te recuerdo en mi boca y en mis manos. Con mi lengua y mis ojos y mis manos te sé, sabes a amor, a dulce amor, a carne, a siembre, a flor, hueles a amor, a ti, hueles a sal, sabes a sal, amor y a mí.”
“Entonces comprendí que no se debe vivir a lo poeta, sino a lo hombre.”
“La poesía es un acontecimiento humano y la puedes encontrar en cualquier parte, a cualquier hora, sorpresivamente.”
“La poesía ocurre como un accidente, un atropello, un enamoramiento, un crimen; ocurre diariamente, a solas, cuando el corazón del hombre se pone a pensar en la vida.”
“Tienes el alma como la piel de los viejos.”
“Te quiero, sí, te quiero: pero a medida de que te quiero se me van haciendo innecesarias las palabras.”
“Perdóname si creo ofenderte, a veces, cuando piso una flor.”
“Acaso es triste el irse… Pero sin el irse no hay el volver.”
“Ojalá te encuentre por aquí, en alguna calle del sueño. Es una gran alegría esta de aprisionarte con mis párpados al dormir.”
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