El retorno a la idea de comunidad artística del muralismo del siglo XX.
A principio del siglo XX, el muralismo fue un movimiento pictórico ligado a la intelectualidad y la Revolución Mexicana, con un deseo intenso por una verdadera transformación radical del país, en términos sociales, políticos y económicos.
Su aspiración no fue casual, sino el deseo de quitarle a Porfírio Díaz las tres millones de hectáreas de tierras que fueron quitadas a los campesinos, crear programas educativos y fomentar las artes por todo el territorio nacional.
Bajo la consigna de crear un arte que ayudara a darle cohesión e identidad al Estado nación, y utilizando los principios modernos para expresar sus ideas a través de murales, el Dr. Atl, precursor del muralismo mexicano, invitó a varios jóvenes animados artistas a unirse a su programa educativo y pictórico. Entre los que se encontraban Roberto Montenegro, Federico Cantú, Ramón Alva, José Clemente Orozco, Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, entre otros importantes pintores de la época.
Bajo esta misma premisa de colectividad, interacción y ayuda mutua en beneficio de la sociedad civil, los nuevos artistas mexicanos que se dedican al muralismo, desean consolidar ideales sociales creados desde la revolución, destacando el nacionalismo en el arte, cambiando ideas preexistentes sobre el arte primordialmente que se ve en las calles, y aportando ideas novedosas para nuestra sociedad en eterno cambio y diferencia social.
El Liberalia Colectivo Itinerante tiene la intención de Transmutar, producir un cambio en el espacio a través de proyectos artísticos-culturales, medios de comunicación, y gestión cultural, con el fin de generen un impacto social en zonas con alta marginación en México. La muestra de estas fotos, se ubican en la colonia Guerrero; 11 murales de grafiti en los que participaron 43 artistas que se extiende desde Eje 1 Norte Mosqueta hasta la Aladama de Guerrero.
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