12 cosas que ya no debes hacer en Facebook

Facebook, más que una red social, es un lugar que muchos de nosotros utilizamos como una ventana al mundo. Lo que antes era leer un periódico de noticias como parte de una rutina diaria ahora es ver el News Feed para ver con qué tipo de información nos encontramos. En un estudio reciente se determinó que, en México, pasamos aproximadamente 7.5 horas al día… sí, casi ocho horas de nuestro día conectados a los bombardazos de estímulos que nuestros fanpages favoritas y nuestros “amigos” comparten. Al estar expuestos a tanto tipo de contenido, estamos fluctuando con emociones que van de lo divertido y emotivo hasta lo dramático, morboso y grotesco. Todavía no hay un estudio definitivo de cómo nos está transformando este torrente de inputs. Pero, si estamos tanto tiempo en Facebook, lo mínimo que podríamos empezar a generar es un listado de las cosas que ya no vamos a tolerar que nos compartan. Aquí una lista de las cosas que más nos llegan a alterar los nervios, y siéntanse libres de añadir puntos en los comentarios. 1. Poking Este gesto, que empezó como un botón cuasi coqueto y que pretendía ser romántico, ahora resulta un poco repulsivo. Alguien que apenas conoces tratando de provocar algo en ti a través de un poke lo está haciendo mal. Creo que ya ni es divertido usarlo irónicamente. 2. Enviar invitaciones a eventos sin sentido No muchos de nosotros nos emocionamos con los baby showers, el cumpleaños de alguien que no conocemos o la invitación a la reunión de la primaria. Tampoco vivimos en Guadalajara, Monterrey y no nos aventaríamos a ir a un evento en Puebla, para el caso. Sí podemos animar en espíritu, por supuesto, pero realmente no necesitamos ser “invitados” y recibir una avalancha de notificaciones para un evento al que claramente no podremos asistir. 3. Escribir en MAYÚSCULAS PARA TODOS LOS POSTS Este punto puede pecar de hipersensible, pero seamos honestos: no nos gusta que nos escriban en mayúsculas, porque parece que nos están gritando. Sí, escribir en mayúsculas es una gran manera de añadir una especie de acento a lo que estás escribiendo, pero nuestra sensibilidad ocular lo percibe como algo alarmante. 4. Mandar mensajes privados masivos Los mensajes masivos son una gran manera de conseguir comunicarte con varias personas a la vez. Para nuestra desgracia, todo el mundo que recibe el mensaje es capaz de “contribuir” a la conversación. Y a algunas personas sólo les gusta responder a todo lo que les mandan y de ahí viene la cascada de notificaciones constantes pero, francamente, ninguna resulta tan relevante como el mensaje original. 5. Poner like a tus propios posts / fotos / videos / status / comentarios Likear tu propio post, también conocido como el auto-aplauso (por no decir auto-fellatio) es completamente innecesario. Al postear cualquier tipo de publicación ya estás indicando que a ti te gusta eso que estás compartiendo. Así que, ¿por qué sientes la necesidad de poner “like” de nuevo? Ah, claro, porque si nadie te pone like después, te vas a sentir mal contigo mismo. Tal vez, revisa antes qué cosas vas a publicar, si eres tan susceptible a la no-crítica. 6. Decirle a la gente lo que hiciste en el gimnasio o en la pista de correr Está bien buscar un poco de motivación e inspiración de la gente para seguir progresando en tu rutina de ejercicio, pero la verdad es que lo haces por validación social y construcción de tu brand personal. Ok, que padre que hagas ejercicio, pero no nos lo tienes que presumir. 8. La crítica constante a los políticos, equipos de futbol, celebridades Sabemos que Facebook es un espacio de libre expresión, pero tu comentario de Peña Nieto, Kim Kardashian o las Águilas del América no suma una nueva perspectiva; todos están mal, ya lo sabemos. Los medios se encargan de ponernos en la cara esas noticias; se amigable y detente a pensar si tu post le va a servir a alguien. 9. Fotos de tortura de animales / personas Este es un tema sensible. Definitivamente, es importante denunciar las injusticias a las que los humanos y animales estamos sujetos. Qué mejor forma de dar a conocer estas atrocidades que por una red social. Pero el mensaje no tiene que llevar la foto alarmante para causarnos un impacto que nos haga  reaccionar. Existen muchas maneras textuales de difundir estas noticias importantes sin tener que apelar a lo grotesco, al morbo, amarillismo, sensacionalismo, etcétera. 10. Hacer cualquier cosa para conseguir likes Todos, en algún momento, hemos prostituído nuestros principios por atención. Pero dejemos de darle importancia a los likes; el número de likes que tiene algo no determina su importancia, sólo su popularidad. Y puesto que la mayoría de nosotros ya no estamos en la preparatoria, ¿a quién chingados le importa? 11. Compartir spam Si pasamos tanto tiempo en Facebook, ya deberíamos reconocer ese video que de repente nos aparece en el News Feed con un título ultra-sensacionalista que es tan sólo una carnada para que le des click. Una vez en el sitio, te piden que lo compartas para verlo… y ahí vas y lo compartes para darte cuenta de que era un fiasco y que no cumplía con tus expectativas. Por favor, ya no hay que caer en estas trampas. 12. Mandar invitaciones de juegos Este puede ser el punto que más deberíamos penalizar; no hay nada peor que recibir una notificación para que le ayudes a avanzar a alguien en un juego. No creo que haya una persona en el mundo a la que le interese tu progreso en Candy Crush, y por otro lado, tampoco nos interesan los otros juegos a los que nos mandas invitación sólo por que era una de las condiciones para darlo de alta.


Comments

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *