Foto destacada: Carlos Trejo y @erickdr
Chalma es una autoridad en turismo religioso, pero Malinalco tiene de todo para disfrutar.
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Se cree que en las pequeñas cuevas que hay en Chalma se hacían oración y se ofrecían sacrificios a Oxtoteotl. Del mismo modo, se dice que se adoraba a Tlazatcotl, diosa de la basura y de las inmundicias. Así que cuando los frailes agustinos llegaron a evangelizar la región, se dirigían a la cueva a destrozar las deidades y se encontraron con Cristo crucificado.
De ahí, que sea una zona ampliamente visitada por el turismo religioso. Además de ser uno de los santuarios más visitados del país, dedicado al Señor de Chalma, la población está rodeada de una gran vegetación, montañas, cañadas, manantiales y dos ríos que cruzan el territorio, el Chalma y Tlaxipehualco.
Aquí te decimos de más lugares que puedes visitar en Chalma, más allá del turismo religioso.
Tradicional talla de instrumentos
En Malinalco puede conocer más sobre la talla de instrumentos musicales en madera, legado prehispánico. Entre estos instrumentos precolombinos se encuentran el huehuetl, un tambor tallado en un tronco de árbol; el teponaztle, un tambor con lenguetas de vibración; y el tlapanhuehuetl, otro tambor bellamente ornamentado. Los consumados artesanos de Malinalco exhiben sus creaciones en el mercado municipal y otros puntos del pueblo.
El Ahuehuete
Este árbol es centenario, y de sus raíces brota y corre agua cristalina que la tradición popular le ha atribuido propiedades milagrosas. Este árbol es un testigo de diversas creencias, ritos de purificación y coronación de los que por primera vez van a Chalma, como un rito de iniciación.
Terraza de los Peregrinos
Es un espacio construido en desniveles que cuenta con escalinatas, arcos, terrazas, un sitio de oración, destinado para el descanso de los peregrinos, así como para llevar a cabo actividades culturales y religiosas en donde sobresale un mural en alto relieve con motivos sacros.
Zona Arqueológica de Malinalco
En Malinalco se encuentra una de las zonas arqueológicas más importantes de América Latina y diversas construcciones religiosas de la época colonial. Casi todas las calles son aptas para sacar fotografías instagrameables, ya que de las paredes de sus casonas coloniales brotan pequeñas flores que salpican el paisaje con muchos colores. Los que ya conocen este pueblo mágico suelen tomarse la cosa con más calma, o van directo a practicar sus deportes de aventura.
Lagunas de Zempoala
Para llegar al sitio hay que recorrer un camino sinuoso y aventurero, ya que las Lagunas están enclavadas en la montaña. Pero al llegar, encontrarás una recompensa increíble: podrás admirar sus apacibles y bellas lagunas rodeadas de bosques de ocote, pino y oyamel. El parque cuenta con 4,700 hectáreas y tiene cuatro lagunas principales y un extraordinario conjunto de formaciones rocosas. En una de las lagunas se puede practicar la pesca deportiva, comer en los locales de antojitos y rentar caballos.
Centro Cultural Universitario Luis Mario Schneider
Mario Schneider fue un intelectual argentino que vivió los últimos 20 años en Malinalco, dejando sus propiedades y patrimonio cultural formado por libros, obras de arte y objetos de colección. Este acervo está a la disposición de todo el público.
Cueva de Chiquihuitero
En esta cueva hay tallas en piedra, restos de pedernal y obsidiana, y otros objetos que muestran que en Malinalco hubo actividad humana durante el Neolítico medio. En varios lugares del municipio se encuentran también pinturas rupestres con imágenes de soles, personas, animales y figuras hasta ahora incomprensibles. Entre estas pinturas prehistóricas destacan Los Diablitos, El Coyotito y Las Caritas.
Tenancingo: la tierra de las flores
El municipio de Tenancingo es conocido por sus flores que son exportadas a Europa y Norteamérica, en donde puedes encontrar todo tipo de flores y para facilitar tu búsqueda en el mercado, el espacio está dividido por zonas dependiendo de la flor, para elegir la que más te agrada. El monumental mercado cuenta con todos los servicios para que tu visita sea agradable
Comer trucha
La trucha de Malinalco es una de las cosas más auténticas del pueblo; ya que las fértiles tierras y el clima favorecen la cosecha de frutas, maíz y otros productos vegetales, así como la cría de especies animales. La trucha al estilo Malinalco es una de las delicias locales, que puedes disfrutar en varios de los acogedores restaurantes de la localidad. Además, hay muchos sitios para disfrutar de los platillos favoritos de la gastronomía mexicana, preparados tanto al estilo tradicional como con las innovaciones introducidas por los chefs locales.
Festival Cultural de Malinalco
Este festival es bastante increíble por sus danzas prehispánicas mexicas, con un espectacular colorido en las vestimentas. Además hay varios conciertos musicales, teatro, exposiciones y conferencias con varias temáticas para gozar de un gran Festival Cultural.
Malinalco y Chalma
Dónde: sureste del Estado de México, Malinalco a 95 km. de la CDMX.
Cuando: todo el año
Entrada libre
