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El intento de parar las subastas como la de Catakawi, hace que las piezas sean más valiosas y deseadas en el mercado negro.
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A pesar de que parar las subastas de patrimonio mexicano de antes de la conquista es uno de los objetivos de la actual administración gubernamental, cada vez se hace más complicado parar la venta ilegal y legal de estos artefactos y ornamentos, cuyos orígenes son conocidos pero la precedencia para la venta continúa siendo desconocida la mayoría de las veces.
Hoy en día no solo existen subastas sino también grupos de Facebook, ebay, YouTube, Instagram, mercado libre que muestran piezas arqueológicas de las antiguas culturas prehispánicas.
La venta de artículos ´mesoamericanos es existe desde hace muchos años alrededor del mundo. Los bienes arqueológicos son comercializados de manera no regulada, a veces ilegal pero muchas veces es una práctica de alcance global que está regulada por trasnacionales establecidas, que ofrecen certificados de autenticidad.
Sin duda, el tráfico lícito e ilícito de bienes culturales es un problema que daña el patrimonio cultural de la humanidad y pone en manos de particulares piezas que son un legado para las futuras generaciones. Paradójicamente, invertir dinero en parar la venta de artefactos, los hace más valiosos y deseas en el mercado negro.
El ultimo intento de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por condenar la venta en línea de diversos bienes muebles de origen prehispánico, ofertados por las comercializadoras Antiques 4U, J. B. Arqueología-Ancient Art y por el vendedor identificado como user-6907b16, desde la plataforma neerlandesa Catawiki; no fue posible.
Se trata de la venta lícita y certificada, de 48 piezas, de las cuales solo 38 cumplen con las características de forma, estilo, materia prima, proporciones, acabados y estado de conservación de cada pieza, provenientes de México.
La subasta cerrará el 20 de noviembre de 2022, pero se trata de monumentos arqueológicos, que forman parte del patrimonio cultural de la nación mexicana y, que constituyen patrimonio inalienable e imprescriptible. Las piezas subastadas tiene una antigüedad que va de los años 300 a.C. a los 1500 d.C.
Todos los bienes dictaminados como de origen precolombino guardan filiación cultural con los estilos de la Costa del Golfo de México, el área maya, el Altiplano Central, la tradición Tumbas de Tiro del occidente mexicano, así como de la cultura de Casas Grandes, la cual se estableció en el territorio que hoy ocupa el septentrión mexicano.
A pesar de que el gobierno ha presentado denuncias ante la Fiscalía General de la República, además de oficios dirigidos a la Consejería Jurídica de la Secretaría de Relaciones Exteriores y al director general de Asuntos Policiales Internacionales e Interpol, pues estas acciones son muy lentas además de que se carece de las competencias necesarias para conseguir la repatriación de dichos bienes.
Así que a nosotros nos queda apelar al respeto por el patrimonio cultural, evitar la compra de estas piezas e informar a las autoridades con el fin de detener la venta así como las subastas con piezas cuyo valor valor histórico, simbólico y cultural sea superior al valor económico.