Si estás visitando la colonia Roma, necesitas dejarte llevar por los sabores y el romanticismo del Rosetta. El servicio, la comida y el ambiente son una combinación ideal para dejarte consentir por el simple gusto de hacerlo.
El restaurante es la representación concreta del sueño de la chef Elena Reygadas, dueña de Rosetta, quien deseaba realizar una fusión de comida italomexicana, con un gusto tanto impecable como elegante. Esta situación llevó a la mexicana a recibir el premio Veuve Clicquot para “la mejor chef femenina de América Latina 2014”.
Para ella, este premio no sólo fue una grata sorpresa y razón de orgullo, sino también “un estímulo para seguir haciendo lo que [nos] apasiona, que es cocinar”. Inclusive, en una entrevista que tuvo con Menú, Reygadas explica que:
Los reconocimientos son motivo de festejo y gratitud; nosotros en Rosetta no trabajamos por galardones, sino por pasión, y si además del premio que ya tenemos nos ubicamos dentro de los 50 Mejores Restaurantes de Latinoamérica, estaremos encantados, pero prefiero no pensar en eso. […] Nuestros padres nos enseñaron a ser fieles y congruentes con nuestras ideas, a desarrollarnos en lo que nos hace felices, a siempre luchar por concretar nuestros sueños.
El premio, ganado por todo el equipo de Rosetta, es un símbolo de la cocina natural que recobra la esencia del buen comer. Sin embargo, Reygadas todavía no cumple con su objetivo de vida: experimentar, explotar, crecer internamente, y así… innovar su propia cocina.
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