Hostería La Bota, refugio de poetas y bohemios

Padre celestial, quítame la cuba de la mano.

Aline Salazar (Cubaline) 

La Bota es un templo consagrado a Baco, un lugar que llama a la gula y al apetito literario. El espectador atento notará el vino seco que corre detrás de los objetos que tapizan las paredes, pues un día, entre copa y copa, Antonio Calera, fundador de este legendario “cultubar”, decidió que no soportaba ver las paredes tan blancas y, cual Jackson Pollock, roció garrafa tras garrafa de vino contra las paredes. 

Aunque actualmente se encuentra en la calle de San Jerónimo, frente al Claustro de Sor Juana, La Bota nació en la calle de Regina (bajo Casa Vecina), donde rápidamente se convirtió en refugio para poetas, bohemios y otros bichos raros que rondaban por las calles del Centro. Lo que fue un lugar de amigos que sobrevivía apenas porque siempre te cobraban menos tragos de los que te habías echado, se ha convertido en un sitio que raramente tiene una mesa libre.

No hay forma de equivocarse con la carta. Primero pide un trago para relajarte y preparar el cuerpo para lo que viene. Si lo que buscas es comer ligero, te advertimos de una vez que estás en el lugar equivocado. Después de probar un OGNI (objeto gratinado no identificado) o recibir un “Gran trancazo de tocino”, vas a necesitar un mezcal o un digestivo para no salir rodando. Pregunta por Adrián Calera, hermano de Toño; si logras convencerlo de que te conoce quizá te invite un último trago.

No olvides llevar bolígrafo; seguramente, después de un par de tragos te vendrá a la mente alguna idea o secreto que quieras dejar escrito en tu mesa o en la pared del baño.

Sigue a Hostería La Bota en Facebook para enterarte de sus presentaciones de libros y recitales de poesía. 

Hostería La Bota

San Jerónimo 40, Centro Histórico

57099016


Comments

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *