Fotos: INAH
Ocomtún fue un centro importante en Campeche y su nombre significa “columna de piedra” en maya yucateco.
Apenas hace unos días hallaron una increíble imagen de 25 centímetros con la figura de un ser descarnado que representaría a una deidad de la muerte, en una comunidad pequeña de Campeche, cerca de Calakmul, y ahora, internándose 60 kilómetros por callejones madereros cubiertos de espesa vegetación, un equipo de investigadores, dirigido por el arqueólogo Ivan Ṡprajc, localizó un sitio monumental dentro de la reserva ecológica Balamkú.
Este lugar fue nombrado Ocomtún que significa “columna de piedra”, en maya yucateco, por las numerosas columnas cilíndricas de piedra dispersas en el antiguo asentamiento.
Se trata de una ubicación de la milenaria urbe maya, que es resultado de la primera temporada de campo del proyecto “Ampliando el panorama arqueológico de las Tierras Bajas Centrales mayas”, aprobado por el Consejo de Arqueología del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, y coordinado por el experto del Centro de Investigaciones de la Academia Eslovena de Ciencias y Artes.
Dicha iniciativa busca ampliar el conocimiento de esta extensa área prácticamente desconocida para la arqueología. Ocupa la parte central del estado de Campeche, colindando al sur con la carretera Escárcega-Chetumal, al oriente con el sector norte de la Reserva de la Biosfera de Calakmul y al norte con la región de los Chenes: 3,000 kilómetros cuadrados deshabitados, cubiertos por la selva mediana.
Este equipo de arqueólogos se enfocó en el extremo norte de Calakmul, en Balamkú, una región sujeta a conservación ecológica, donde por imágenes aéreas del terreno parecía probable la presencia de vestigios arqueológicos.
En marzo de 2023, el National Center for Airborne Laser Mapping, de la Universidad de Houston, Estados Unidos, llevó a cabo un escaneo láser (LiDAR) aerotransportado de esa superficie, cuyas imágenes resultantes fueron de gran ayuda para el proyecto, integrado también por el especialista en epigrafía maya, Octavio Esparza Olguín, el geodesta Aleš Marsetič, el maestro Atasta Flores Esquivel, los arqueólogos Quintín Hernández Gómez y Vitan Vujanović, así como varios trabajadores de comunidades cercanas.
En los datos LiDAR se reconocieron numerosas concentraciones de estructuras prehispánicas que, como lo revelaron las inspecciones en campo, comparten varias características, además de tener peculiaridades que contrastan con lo conocido de otras partes del área maya. “La mayor sorpresa resultó ser el sitio ubicado en una ‘península’ de terreno elevado, rodeada por extensos humedales. Su núcleo monumental cubre más de 50 hectáreas y cuenta con diversos edificios de grandes dimensiones, incluyendo varias estructuras piramidales de más de 15 metros de altura.
Se cree que “El sitio fungió como un centro importante a nivel regional, probablemente, durante el periodo Clásico (250-1000 d.C.). Los tipos cerámicos más comunes que recolectamos en superficie y en algunos pozos de sondeo son del Clásico Tardío (600-800 d.C.); no obstante, los análisis de muestras de este material nos ofrecerán datos más confiables sobre las secuencias de ocupación”, detalla el doctor en antropología.
Las numerosas columnas cilíndricas halladas, debieron ser parte de las entradas a los aposentos superiores de los edificios cercanos a Ocomtún, y se ubican los sitios de la región de los Chenes, a más de 30 kilómetros al noreste: Nadzcaan, 36 kilómetros al sureste, y Chactún, a 50 kilómetros al sureste, reportado hace una década por este mismo proyecto.
Asimismo, en Ocomtún está conformado por tres plazas de imponentes edificios, rodeadas por varios grupos de patio dispuestas casi en círculos concéntricos y un juego de pelota. También se halló una calzada que conecta el complejo sureste con la parte noroeste, donde se ubica la construcción más voluminosa del sitio.
Abunda que se trata de una acrópolis de planta rectangular, cuyos lados miden 80 metros y su altura es de unos 10 metros, y en su parte norte hay una pirámide que se eleva 25 metros sobre el terreno natural. Finalmente, se informó que se exploraron otras estructuras con características parecidas a Ocomtún que cuentan con escalinatas, columnas monolíticas y ausencia de monumentos con inscripciones. También se encontraron varios conjuntos de uso desconocido, pero que podrían ser altares, mercados o espacios destinados a rituales comunitarios. Aunque sólo investigaciones más profundas podrán revelar las funciones de estos conjuntos.