Entre las muchas maravillas de nuestro país, se encuentra un conjunto de construcciones de estilo europeo que engalanan nuestro paisaje: conoce los castillos de México.
Cuando pensamos en México, generalmente nos vienen a la mente grandes pirámides, juegos de pelota, centros ceremoniales o haciendas. Sin embargo, algo que no es tan comúnmente conocido es que en la República hay un buen número de castillos, construidos por personajes que se quisieron traer un cachito de Europa para acá. En esta lista concluiremos con el Castillo de Chapultepec, ya que es el más conocido; pero nos concentraremos en otras joyas igual de impresionantes. Desde Veracruz hasta Aguascalientes, los castillos de México hacen gala de nuestra increíble diversidad cultural, y nos posicionan como uno de los países con más destinos turísticos de calidad del continente americano y del mundo.
Ex-hacienda de Chautla, Puebla
Imagen de: El Universal
El castillo de Chautla parece que fue sacado directo de un cuento de hadas. Se levanta a la mitad de una propiedad de 60 hectáreas, rodeado de agua, bosque y prados preciosos. La hacienda nació a finales del siglo XVIII, con terrenos que abarcaban dos estados. Alcanzó su esplendor el siglo siguiente, cuando Eulogio Gregorio Gillow, hijo del propietario original, la convirtió en uno de los feudos más poderosos de la región. Aquí se construyó la primera planta eléctrica del continente americano, lo cual cimentó su dominio. El señor Gillow construyó un castillo inglés junto a los lagos, el cual fungiría como casa magisterial. Hoy en día, es una casa de descanso que tiene abiertas sus puertas a los turistas.
Castillo Ortega-Douglas, Aguascalientes
Fotografía de: Mario Yair TS
La historia de este castillo es muy particular: su dueño lo erigió por un capricho amoroso. Su historia comienza a mediados del siglo XIX, cuando el escocés John Douglas emigró a México. En poco tiempo, se convirtió en una de las personas más poderosas y ricas de la región. Tiempo después, su nieto, Edmundo Ortega Douglas, levantó el castillo como regalo de bodas para su prometida, Carmen Llaguno Cansino. Era una réplica perfecta de las moles europeas: tenía foso, puente levadizo, vitrales y hasta un pequeño lago con cisnes. Después de cambiar de manos varias veces, ahora está siendo remodelado, y esperamos poder acceder a él en un futuro próximo.
Palacio de Cortés, Morelos
Imagen de: ontheroadin.com
A la mitad de nuestra lista de castillos de México se ubica una de las construcciones más famosas del centro del país. Como su nombre lo dice, fue edificado por Hernán Cortés poco después de la conquista, y fue el lugar donde asentó la encomienda que el otorgaron al recibir el Marquesado del Valle de Oaxaca. Ahora es un monumento histórico que embellece el centro de Cuernavaca. En 1974 se convirtió en la sede del Museo Regional Cuauhnáhuac, y cuenta con un sinnúmero de objetos y obras de arte de siglos anteriores.
Castillo de Santa Cecilia, Guanajuato
Imagen de: booking.com
Nos movemos un poco más al norte para visitar un esplendoroso hospedaje medieval. Antes de que se levantara esta bella construcción, el terreno era la sede de la hacienda de beneficio de San Francisco Javier, en 1686. Era uno de los principales centros mineros y metalúrgicos de Guanajuato. Eventualmente fue abandonado, y no se recuperó sino hasta 1951, cuando el hotel se edificó, a imagen y semejanza de los castillos europeos. Ahora es uno de los íconos de la ciudad, y ofrece una estadía de lujo a sus huéspedes, con sus 100 habitaciones, capilla, terraza, alberca y preciosos jardines.
Fortaleza de Perote, Veracruz
Imagen de: Formato Siete
Si bien las entradas anteriores en nuestra lista de castillos de México fueron construidas con fines ornamentales o de vivienda, el Castillo de Perote era una fortaleza militar. Fue edificado en el siglo XVIII, bajo las órdenes del virrey Joaquín de Montserrat. La razón de su existencia fue el temor que tenía el gobierno español ante un ataque inglés, después que la corona británica tomara La Habana en 1762. De aquí en adelante, sufrió transformación tras transformación: primero, sirvió de resguardo para los regimientos españoles durante la Guerra de Independencia. Luego, albergó al primer Colegio Militar. Después, se ordenó destruir en 1850, pero la empresa no se llevó a cabo. Se habilitó como cárcel estatal hasta que, finalmente, se comenzó a acondicionar como museo en el 2008.
Castillo de Chapultepec
El único Castillo Real de América Latina es el que se encuentra en el Bosque de Chapultepec. Tal vez creas la función de este lugar únicamente fue para albergar a Maximiliano y a su esposa, pero lo cierto es, que se trata de un espacio que ha funcionado como más que una casa, desde su construcción hasta la fecha.
Desde tiempos inmemorables, el Castillo de Chapultepec ha sido un lugar sagrado. Fue en algún punto una montaña, llena de manantiales y ahuehuetes, que encantó a Moctezuma. Un majestuoso cerro, que vigilaba la ciudad desde las alturas y observó años más tarde, en silencio, la llegada de los españoles a Tenochtitlán.
En 1785 este espacio, de pronto, se volvió en la sede del único palacio monárquico de América Latina y se convirtió en el Castillo de Chapultepec un paraíso arquitectónico lleno de jardines, laderas y piedras prehispánicas, coloniales e imperiales. En la Colonia este lugar albergó a los virreyes más purulentos de la Nueva España y luego, durante el México independiente, se transformó en Colegio Militar y vio desvanecerse en su piso a los “niños héroes.”
Si quieres conocer de manera más detallada la historia de alguno de estos castillos, date una vuelta por aquí, aquí o acá.
*Imagen destacada de: INAH